Análisis de la campaña vitivinícola europea 2024
Un clima adverso y los retos económicos marcan un descenso del 3% respecto al año anterior, con Francia y Alemania como los países más afectados.
El 29 de noviembre de 2024, la OIV celebró su centenario con un acto especial donde su Director General, John Barker, presentó un análisis exhaustivo de la evolución del sector vitivinícola durante el último siglo. El informe destaca cambios en producción, consumo y comercio, además de los efectos del cambio climático y las fluctuaciones económicas internacionales. Asimismo, Barker anunció que el nuevo plan estratégico de la OIV se publicará a inicios de 2025.
Producción mundial en mínimos históricos
Durante la ceremonia, Giorgio Delgrosso, jefe del Departamento de Estadística de la OIV, reveló que la producción mundial de vino en 2024 se estima entre 227 y 235 millones de hectolitros, con una media de 231 millones. Este dato supone una disminución del 2% respecto a 2023 y un 13% por debajo de la media de los últimos diez años, siendo el nivel más bajo desde 1961.
En la Unión Europea, que concentra el 60% de la producción mundial, el volumen total se proyecta en 139 millones de hectolitros, excluyendo mostos y zumos. Esta cifra representa una caída del 11% respecto a la media quinquenal, atribuida a fenómenos climáticos extremos como sequías, lluvias torrenciales y tormentas que afectarán tanto la cantidad como la calidad de las cosechas.
Contrastes en Europa
Italia recupera el liderazgo como mayor productor mundial con 41 millones de hectolitros, un 7% más que en 2023, aunque un 13% por debajo de su media quinquenal. Francia, por su parte, enfrenta una fuerte caída del 23%, alcanzando apenas 36,9 millones de hectolitros debido a lluvias excesivas, enfermedades y sequías. España, en cambio, logró un aumento del 18% hasta los 33,6 millones de hectolitros, impulsado por el crecimiento en regiones como Castilla-La Mancha y Extremadura.
Otros países europeos muestran resultados mixtos. Alemania y Rumanía registraron caídas significativas, mientras que Hungría experimentó un incremento del 22%, alcanzando su mayor nivel de producción desde 2010.
América y el hemisferio sur
En América, Argentina lidera la recuperación con una producción de 10,9 millones de hectolitros, un aumento del 23% gracias a condiciones climáticas favorables. Sin embargo, Chile y Brasil registraron descensos pronunciados del 15% y 25%, respectivamente.
El hemisferio sur en general experimentó una baja del 2% en comparación con 2023, alcanzando 46 millones de hectolitros, el nivel más bajo desde 2004. En Sudáfrica, las inundaciones y enfermedades redujeron la producción un 5%, mientras que Australia mostró una leve mejora del 5%, aunque sigue un 16% por debajo de su media quinquenal.
Retos y perspectivas
El sector vitivinícola se enfrenta a un panorama complejo, marcado por las adversidades climáticas y la presión económica. La OIV destacó la importancia de adaptar estrategias para mitigar los efectos del cambio climático y responder a un mercado global en transformación.
“Estamos en un momento crítico de cambios e incertidumbres, pero también de oportunidades para transformar y fortalecer la industria”, concluyó Barker, enfatizando la necesidad de innovación y cooperación global para enfrentar los desafíos que plantea el futuro.
FUENTE: VINETUR.COM